jueves, 25 de noviembre de 2010

Estas cosas sólo pasan en la Argentina

Es una pelotudez (ni siquiera me esfuerzo en decir "parece una pelotudez").

Pero la historia es así.

Resulta que a la Junta de Andalucía (el gobierno regional) le dio por inspeccionar las calidades de los aceites de oliva que se venden en supermercados y grandes superficies (Carrefour, Auchan) y comprobó que en 14 de los 25 inspeccionados (más de la mitad, oiga) los que vendían como "Extra Virgen" resultaron ser virgen o menos. Esto tiene su miga (siguiendo con los casticismos) porque los españoles fueron pasándose del consumo de aceite de girasol al de oliva (subvenciones mediante) a lo largo de estos últimos años (recientemente, vamos) y dentro de los olivas, discerniendo entre calidades. Tan es así que mi matrimonio se debe en parte al mismo: al ver mi esposa el bidón de cinco litros de verdísimo oliva extra virgen en mi otrora cocina madrileña, (re)cayó en mis brazos. Y aquí estamos. (un día lo contaré)

Bien, volviendo al tema que nos ocupa, estas grandes cadenas no tuvieron ningún problema en truchar las denominaciones, total el consumidor qué se iba a dar cuenta, y así fue, para cobrarles demás (hay diferencias de precio importantes) les falsificaron los aceites de oliva, los grados de acidez, etc, etc. Esas cosas que el neoliberalismo vendió populistamente al pueblo transformado en consumidores y de ahí sin transición, a consumidores de cosas que no son lo que dicen que son. Los aceites no son tóxicos ni nada por el estilo (no es que no fueran capaces, eso ya ocurrió con el aceite de colza desnaturalizada en los 80 con centenares de muertos y miles de damnificados). Pero significa lo que quiere significar: este (ése, en realidad) sistema, que supuestamente privilegia a los consumidores, en realidad los trata como lo que son para ellos: víctimas, entes individuales a los que parasitar hasta sacarles todo todo todo, al precio que sea. ¿Dunga dunga o muerte? ¡Muerte! Pero antes un poco de dunga dunga...

Estoy intrigadísimo de cómo va a reaccionar la "gente" en Irlanda con los ajustes propuestos. Tengo la impresión de que la cosa no va a ser tranquila.

RH

6 comentarios:

  1. Ojala no sea tranquila la reaccioon de los Irlandeses , ese modelo que tanto amaba terragno para nosotros y que por suerte implosionó en su propia lógica nefasta , esperábamos que los franceses se pusieran a resistir en serio el incremento de la edad jubilatoria y con paros y todo gano Sarkosi e impuso su ajuste ,se desarma el estado de bientestar y los europeos responden serviles como si no hubiesen aprendido nada de lo que pasa en latinoamerica . En Euriopa se precisa que aparezca un Chavez que venga a romper con esa logica .

    Un abrazo

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  2. Yo también espero que no, creo que los irlandeses no son ovejas; para llegar a ese paráiso al que supuestamente habían llegado les hicieron tragar años de moderación salarial; ahora, a la hora de cosechar... se lo habian llevado todo. As usual.

    Abrazo cumpa

    Rick

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  3. En rigor, no es ninguna pelotudez, estimado. A mí me gustaría que por aquí alguien controlara en serio qué es lo que compro y como (o bebo). En fin, que alguna autoridad estatal se pusiera de mi lado. Lo que no sabía es que la posesión de un “bidón de cinco litros de verdísimo oliva extra virgen” provocara un efecto seductor sobre las damas. (Contalo). Un abrazo.

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  4. Yo también espero la historia del bidón de cinco litros de aceite de oliva extra virgen seductor. Como que se quita méritos ud., tocayo, y se los adiciona al aceite. ¿Mire si venían a controlárselo y lo encontraban adulterado?

    Abrazo.

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  5. En relación con el aceite de oliva, es una de mis debilidades. Pero tras leer tu post, Huinca, y recordar que hace 8 años que estoy divorciado, creo que por las dudas lo cambiaré por el de girasol o mezcla. Y me sumo a los que quieren que cuente su historia.
    En cuanto a Irlanda, soy algo esceptico. Se trata de situaciones que afectan a determinados países de la eurozona. Irlanda, Francia, Grecia, Portugal, España en cualquier momento. Pero otros países del continente, vinculados o no a la eurozona podrian servir como dique de contención a las protestas sociales. Mientras 4 o 5 países del viejo continente estallan, no veo al resto de la sociedad europea haciendo causa común o apoyando tan siquiera a sus coterráneos hundidos en la más profunda crisis. Quiero decir que solo una reacción conjunta podría provocar un cambio de modelo, aunque sea parcial. A lo mejor pido mucho, pero no le veo salida de otro modo.
    Abrazos para Usted querido Huinca!!!

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