Hemos visto cómo la verdad se abrió paso una y otra vez.
¿No acabamos de ver a Alberto Fernández crticando al gobierno, SU gobierno, por la expropiación de YPF y después saliendo a la luz que cobraba un sueldazo de Repsol?
¿No vimos a De Narvaez con Alfonsín, a Lilita con Llambías?
¿No vimos a Pino ponderabrazado por el redactor de proclamas golpistas Grondona?
¿No hemos visto a Cobos encumbrado por su traición por el multimedio?
¿Duhalde, reverenciando a Magnetto?
¿Cómo les va a todos ellos, que en un momento determinado, por despecho -y evidentemente, porque en su natural estaba la potencia de la máxima traición- se entregaron al mostrador de TN y los multimedios?
Todos fueron primero parasitados y luego engullidos, digeridos y excretados por TN y los demás clarines.
Borrados del mapa político, apestados para la sociedad y para antiguos compañeros. Nadie jamás volverá a fiarse de ellos.
Hace poco fue Lanata el que, después de años de ama(r)gos, finalmente se entregó a la parka traición.
Ahora, ver a Moyano en a Dos voces, aparte de la tristeza que pueda dar, debería tranquilizarnos.
Él sabe, él eligió.
Nosotros, a partir de este momento, debemos encontrar la distancia justa para, por un lado, no perder de vista lo que ocurre, y, por el otro, que no nos alcancen los escombros de lo que será/es su segura caída.
Y Bonelli, TN, Clarín... su apuesta, con el acogimiento de Moyano, es a un caos que derribe a este Gobierno. Porque por más odio que le (y nos) tengan los seguidores de TN a este Gobierno, la incoherencia absoluta de tener al demonio de décadas -Moyano- como socio, chirría y chirriará de una forma difícilmente superable. No es un originalmente desconocido y estúpidamente sonriente Cobos. Es Moyano, el diablo.
Tengamos calma. Quizás veamos dos derrumbes al precio de uno.
Tengamos en cuenta un aspecto simbólico de la medida de máxima -hasta el momento- decidida por Moyano: dejarnos sin combustible. Justamente, lo imprescindible para él, para el trabajo de los trabajadores a los que representa. Lo que hoy quiere hacernos faltar, si mañana le falta a él su poder se habrá terminado. Es simbólicamente fuerte.
Confiemos en el criterio de Cristina. Irá dando pasos, cálculo de consecuencias. Como siempre lo ha hecho.
Y a los compañeros, prudencia. Se comprende la ira, la rabia que producen estos hechos. No nos dejemos llevar. Debemos enfrentarnos a Moyano por su presente. Que con el pasado de Moyano cargue TN, que tantos años lleva intentando que este, su pasado, sea noticia de titular.
Si Moyano decidió hundirse, como ya le ocurriera a la extensa lista de personajes arriba mencionada, es su decisión. Quizás con esto que está haciendo nos brinde un último servicio; la ruina definitiva del grupo Clarín como alternativa para informarse. A Clarín le quedará -como ya lo están haciendo- el uso de la violencia. Es algo con lo que debemos contar. Para eso existen las fuerzas de seguridad y el imperio de la ley.
¿Peco de optimista? Puede ser. Pero creo que de estas situaciones se sale fortalecido, con la cabeza más despejada, y el panorama más limpio.
Todas ventajas.
¿No acabamos de ver a Alberto Fernández crticando al gobierno, SU gobierno, por la expropiación de YPF y después saliendo a la luz que cobraba un sueldazo de Repsol?
¿No vimos a De Narvaez con Alfonsín, a Lilita con Llambías?
¿No vimos a Pino ponderabrazado por el redactor de proclamas golpistas Grondona?
¿No hemos visto a Cobos encumbrado por su traición por el multimedio?
¿Duhalde, reverenciando a Magnetto?
¿Cómo les va a todos ellos, que en un momento determinado, por despecho -y evidentemente, porque en su natural estaba la potencia de la máxima traición- se entregaron al mostrador de TN y los multimedios?
Todos fueron primero parasitados y luego engullidos, digeridos y excretados por TN y los demás clarines.
Borrados del mapa político, apestados para la sociedad y para antiguos compañeros. Nadie jamás volverá a fiarse de ellos.
Hace poco fue Lanata el que, después de años de ama(r)gos, finalmente se entregó a la parka traición.
Ahora, ver a Moyano en a Dos voces, aparte de la tristeza que pueda dar, debería tranquilizarnos.
Él sabe, él eligió.
Nosotros, a partir de este momento, debemos encontrar la distancia justa para, por un lado, no perder de vista lo que ocurre, y, por el otro, que no nos alcancen los escombros de lo que será/es su segura caída.
Y Bonelli, TN, Clarín... su apuesta, con el acogimiento de Moyano, es a un caos que derribe a este Gobierno. Porque por más odio que le (y nos) tengan los seguidores de TN a este Gobierno, la incoherencia absoluta de tener al demonio de décadas -Moyano- como socio, chirría y chirriará de una forma difícilmente superable. No es un originalmente desconocido y estúpidamente sonriente Cobos. Es Moyano, el diablo.
Tengamos calma. Quizás veamos dos derrumbes al precio de uno.
Tengamos en cuenta un aspecto simbólico de la medida de máxima -hasta el momento- decidida por Moyano: dejarnos sin combustible. Justamente, lo imprescindible para él, para el trabajo de los trabajadores a los que representa. Lo que hoy quiere hacernos faltar, si mañana le falta a él su poder se habrá terminado. Es simbólicamente fuerte.
Confiemos en el criterio de Cristina. Irá dando pasos, cálculo de consecuencias. Como siempre lo ha hecho.
Y a los compañeros, prudencia. Se comprende la ira, la rabia que producen estos hechos. No nos dejemos llevar. Debemos enfrentarnos a Moyano por su presente. Que con el pasado de Moyano cargue TN, que tantos años lleva intentando que este, su pasado, sea noticia de titular.
Si Moyano decidió hundirse, como ya le ocurriera a la extensa lista de personajes arriba mencionada, es su decisión. Quizás con esto que está haciendo nos brinde un último servicio; la ruina definitiva del grupo Clarín como alternativa para informarse. A Clarín le quedará -como ya lo están haciendo- el uso de la violencia. Es algo con lo que debemos contar. Para eso existen las fuerzas de seguridad y el imperio de la ley.
¿Peco de optimista? Puede ser. Pero creo que de estas situaciones se sale fortalecido, con la cabeza más despejada, y el panorama más limpio.
Todas ventajas.
RH
De todos los que mencionás como engullidos por el multimedios, sólo Carrió y Duhalde tenían una base sobre la cual pararse. Cuando Carrió se vendió, comenzó a descender. Cuando Duhalde se regaló, ya no tenía nada.
ResponderEliminarMoyano utiliza a TN y se deja utilizar. Pero que haya convocado a un paro desde A Dos Voces es señal de desesperación.
Abrazo, Rick.
Me alegro que, aún sin charlarlo, estemos nuevamente de acuerdo. Cuestiones de estilo nomás, pero algo similar publiqué hoy en Peronismo por Opción. Creo que esto recién empieza y no es ajeno a la recomposición que va a darse en vistas al 2015. Me apena mucho la actitud de Moyano, pero él decide. Que se haga cargo.
ResponderEliminarcomo peruca sin vueltas, me entristece la auto encerrona del negro, comparto el juicio tuyo de que camina hacia su propio derrumbe, pero te lo matizo con puntualizaciones. Carrió, Duhalde, Alfonsito... eran políticos, que necesitan revalidación directa para seguir respirando. Este es un toro que no se desangra así nomás, puede causar mucho daño en el camino...
ResponderEliminar2° este era de lo más potable del olimpo sindical; con rincones turbios, pero con agallas, pensemos en los que quedan... Lezcano... Daer... Cavalieri... mama mía!
Guille
Pd:Una por el lado positivo; Clarín y la Nación eran intocables y ahora, no cayeron pero les pusimos un par de ganchos al hígado que los tienen atontados
Como no peronista (pero tampoco anti) nunca dejan de sorprenderme los argumentos al estilo de Guille, como necesitando matizar el desbarranque de uno que, en primerísimo lugar, se cagó en cuestiones básicas, esenciales, del ADN y "pueblo" peronistas. ¿Cuál es la necesidad de "matizar" a un renegado (sea toro o ternerita y para no llamarlo traidor, como seguramente lo sentirá mucho peronista)? - Encima alguien que nunca despertó mayores entusiasmos ni en los paladares K menos sensibles. El tipo era el batracio menos malo de tragar respecto al resto de sus colegas más asquerosos.
ResponderEliminarQuizás y personalmente espero que sea así, y que el único matiz "favorable" del rubito hugo sea la constatación de que los batracios no son negocio y que hay que encontrar modos de abrir la puerta y que salgan a jugar en los gremios tipos mejores, ¿debe haberlos, no?