viernes, 29 de enero de 2016

HERIDA INSANABLE

La verdad es que estoy desolado, estamos desolados. Más allá del esfuerzo que hacemos por ponerle nombre a lo que sentimos, odio, enojo, frustración, dolor, hay algo tremendo, sin vuelta atrás,, que no tiene antecedentes en la historia de este territorio, algo que hace único lo que está ocurriendo:

NO TIENE COARTADA.

El 55, la dictadura tenían varias coartadas, fueron golpes militares y más allá de las simpatías evidentes que generaron, fueron "incuantificables", por más que uno supiera y oyera. bueno, fue "por la fuerza".

Ahora no.

Ahora no es solamente que fuera por la voluntad popular. Es que fue además diciendo todo lo que iban a hacer. Porque no nos engañemos, más allá de que el zanguango dijera "vamos a mantener la AUH, Aerolineas e YPF van a seguir siendo del Estado....", eso no fue decisivo.

Lo decisivo fue HUIR  de esa interpelación a la que los sometimos, sobre en qué tipo de sociedad querían vivir, ellos, y sobre todo, sus hijos y sus nietos, que tendrían, nótese el condicional, la certeza de quienes son sus abuelos.

La mitad de la sociedad que habita este territorio decidió entregar a la otra mitad en el ara sacrificial. Así, sin más. SABIENDO.

En nombre de unos estúpidos seudo valores seudo morales, de dicotomías trabajo/vagancia, que están totalmente ausentes de cualquier tratado de mecánica celeste, y encima falsas, porque si hacemos el promedio de horas dedicadas a salvar al capitalismo nuestra mitad le ganaría por paliza a la suya.

A la asesina.

Sí sí. Hace un rato venía por Rivadavia, la avenida con ese nombre que coherentemente parte a la (so)ciudad en dos, y había decenas de polis equipados antidisturbiamente. Muchos. Muchos. Pregunté a qué se debía el despliegue, y era por los manteros. ¡Por los manteros, los chabones y chabonas equipados como si fueran a enfrentar a una rebelión masiva!  Y sí, ahora ése es el planteo. No sólo ganaron: protagonizan una "legitimidad" absoluta en la que se montan para hacer lo que consideren. Ahora mismo una jueza consideró que Macri podía mandar a los jueces a la Corte Suprema en comisión. Y ya está. Uno se siente herido, y se siente estúpido por haber respetado unas reglas básicamente arbitrarias, muchas de ellas producto de acuerdos a oscuras. Y uno creyó bueno, las reglas hay que cumplirlas. Está visto que no. Las reglas producto de acuerdos a oscuras son pasibles de ser violadas y esta violación genera nuevas reglas que... usté ya me entiende.

Pero no quiero alejarme del tono trágico, de duelo que lleva esto que descargo de las profundidades de mi alma u otra parte de mi fitogeografía.

Lo que trato de decir es que esto nos lo gritan en la cara, nos lo hacen explícitamente. "Nos" es a la sociedad, a los buenos, a los que cada día van e imperfectamente hacen lo que pueden. Hacemos lo que podemos... ¿Qué será cuando todo lo que se está de-larvando, que se ninfa y después se mariposa salga completamente a la luz, negras mariposas gigantes que tapan el sol, hediondas, terribles? ¿CUANDO ESTE PAÍS CHOQUE CONTRA UNA PARED? Es muy terrible el sentimiento, porque yo por mi natural contrafóbico siento que zafo, que no tendré problemas... pero al mismo tiempo sé que algo muy profundo se rompió. Que con esas personas, familiares,. conocidas, con las que "ya no podía hablar", sé que hay un volcán cuya lava se acerca a todas las toberas, que NO QUIERE PERDONAR, que está tan pero tan herido... ¿Cómo se maneja esto? Porque, si Dios quiere no vamos a tener la coartada de los alemanes, quienes, al haber padecido finalmente los horrores de la guerra y el sometimiento de una posguerra en principio humillante pudieron medio como zafar, decir yo no sabía que era así, excusarse de mil y una maneras.

Acá no va a pasar, no va a haber coartada. Y uno no es como ellos, en el sentido que no va a "cambiar", uno va a dejar otra vez que digan cualquiera... Y será otra vez... Habrá que ponerse con todo a educar, a re-educar.... al estilo de Pu-yi ¿no? el último emperador que fue jardinero... Habrá que pensar. Porque no se puede vivir con esta bolsa de hiel que nos dejan, que nos inoculan.

Pero a la vez no se puede perdonar. Esta es la gran diferencia. Lo hacen sabiendo.

Qué difícil es todo.

1 comentario:

  1. Cierto. Esta vez no tienen excusas. Para lo que hicieron, para el sadismo, para todo.
    Lo único que deseo es que estas fuerzas que desataron puedan asumir forma institucional sin que tengamos que caminar sobre escombros.
    Pero no parece.

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