Naturalmente, y por desgracia, no sorprende el uso de oposición y medios de la muerte de Mariano.
"Ya lo decíamos", "se juega con fuego", y así.
Aparte del duelo, bancarse la fealdad absoluta de tantos graznidos impostando voces humanas.
Y la flagelación de muchos de los propios, como si tuvieran algo que ver con gente de la cual siempre han sido enemigos; de la que no son ni han sido nunca cómplices. Dejándose enredar en el fango de ese Behemoth que ahora ruge basura, después de haber facilitado y fomentado a lo largo de décadas las muertes de tantos inocentes.
De entrecasa, ayer alguien muy cercano dijo "el PO ya tiene el muerto que buscaba".
No estuve de acuerdo, argumenté, no sé que dije. Estaba mal pensar así.
Pero hoy:
"El delegado de los trabajadores ferroviarios de empresas tercerizadas de la línea Roca, Flavio Bustillo, advirtió que "no alcanzó un muerto" para agilizar el funcionamiento de la cartera en relación a la puesta en marcha de una solución para la situación de 117 personas que fueron despedidas,"
Si fuera familiar de Mariano, tendría algo más que palabras con Bustillo.
PD: Triste y consternado ante tanta fealdad, le escribí a mi amigo:
"Tenías razón".
RH
Más que el mismo PO lo buscaba la Derecha.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es cierto. Me faltaba mencionarlo. Justamente eso es lo que me agarró desprevenido, no lo esperaba desde ese lado
ResponderEliminarla verdad, si bien pienso similar a ustedes, creo que lo buscaban todos los que no apoyan el gobierno, sean del signo que sean.
ResponderEliminarHay como una "cosa" instituída que cuanto más violento es algo, más efecto produce y por ende, mejores resultados conlleva. Lo tenemos impregnado como sociedad. ¿No les llama la atención cuánto figura la palabra "un muerto" en relación al modo o forma eficaz y contundente de concluír conflictos, sean legales, sociales o laborales?
Como si los conflictos tuvieran el precio de una vida humana. Como si la única vía de resolución de los conflictos fuera la ofrenda de una vida. El mártir como solución a los problemas. Parecemos una sociedad de paganos entregando jóvenes a los dioses a cambio de lluvia.
Saludos a ambos.
La muerte de este muchacho a uno lo afecta, antes que nada, desde lo más elementalmente humano, de ese lugar donde lo político pasa a segundo plano. Si uno tiene hijos no es nada dificil que los vea como Marianos potenciales. No es una mirada que podamos relativizar, no nos va a salir.
ResponderEliminarAhora, también tenemos ideas, ideología, convicciones que tampoco podemos eludir y no creo equivocarme mucho si pienso que muchos pensamos que el PO y demás sectas por el estilo, "necesitan" a los Marianos muertos, los buscan cuando solamente tienen una metodología en la que no importa si enfrente está la selección del Cottolengo, la federal o los matones de la UF. Esa metodología hace de cualquier Mariano un muerto no casual; como tampoco es casual que rapidito, rapidito "mataran" a la persona herida grave, la propuesta de "intercambio" (declaro si me recibe la presidente, sino no) y la frutilla del postre, doña rosa legrand y la orgía mediática donde los "compañeros" del muerto, lo ponen en valor, en precio, coincidiendo con la prédica antigobierno/antipolítica.
Tal vez este chico haya "ofrendado" su vida, seguramente sin desearlo; lo que es obvio para mí es que hay un concurso para aprovechar su muerte y no me extrañaría nada que haya unos cuantos calculando lo bien que les vendrían algunos Marianos más.
qué horror!! qué no alcanzó un muerto?? posiblemente ,si sabemos que la expresión"un muerto" no designa identidad , y que hablar de la identidad implica reconocer a un sujeto determinado, Mariano que tiene una historia de vida propia ; esaa declaraciones no están tan lejos de la cita favorita de Eduardo Feinmann "uno menos",que marca un execrable desprecio por el ser humano... no es tan diferente esta izquierda en lucha portadora anacronismos , de la derecha fascista... porque ésta singular "lucha" necesita de "un muerto" para su justificación. Revisar y analizar las bases de este sindicalismo revolucionario y anárquico, es un deber; Y el compromiso social de todo ciudadano es necesario para no banalizar el hecho
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