Nunca el que obedece ciegamente termina
siendo demasiado diferente al que lo manda
Julio Blanck, hoy
Al fondo, el relato de los incidentes en Once, tan terribles en su inoportunidad, tan poco espontáneos, tan rellenos del palabrerío de los terroristas de la palabra que describen a esos individuos prendiendo fuego a las papeleras como personas que desde hace años que protestan, y que bueno, esto más o menos tenía que terminar así.
Entonces, leemos el desgraciado editorial de Julio Blanck, en el cual le cuesta muchísimo disimular su gozo, y en el que, ya desde el título delata sus propias intenciones:
Y entonces, viene inmediatamente a la cabeza que Julio Blanck es el autor de la célebre tapa de Clarín del 2002, respecto del asesinato de Kosteki y Santillán::
Pinchando el titular se va al reportaje en donde Julio Blanck miente respecto de que no sabían nada de que la policía era autora de los asesinatos; sus propios colegas de Clarín lo supieron desde el primer momento. Alguien con algo de vergüenza tendría que haber salido de la escena, eso que pide tanto a los demás. Pero no, ahí siguió, y desde el conflicto de la 125 se pasó escribiendo editoriales en los cuales primero difusamente, y luego ya explícitamente daba rienda suelta a sus fantasías destituyentes, enmascarándolas, al igual que su par Van der Kooy, en invocaciones al "inevitable fin del kirchnerismo"
La estrategia de terror de Clarín estaba vigente en ese entonces como hoy, como durante la dictadura. No hay nada casual; lo que está pasando ahora es provocado, justamente por reiteración del discurso deslegitimador, cercano al fascismo que destila el discurso de Blanck y de todo Clarín en general. El de verdad, no esa ridiculez continua que denuncian Lanata, Caparrós y Sarlo, aficionados en este juego que los de Clarín juegan como nadie. Porque el discurso que desemboca en el fascismo es el que presenta a todo como sospechoso, como falso, relatando lo ocurrido como inevitable, como que tenía que pasar, y que, pase lo que pase, ellos se van a encargar que quede bien claro quién es el verdadero culpable.
Pero resulta que Julio Blanck, el que escribió "La crisis causó 2 nuevas muertes", y que después de eso tendría que haber renunciado y haberse dedicado a otra cosa, en esta frase con la que pretende inculpar a Cristina, se delata a sí mismo y prácticamente a todos sus colegas.
A tu salud, Blanck. Gracias por decirlo.
RH
Hay que vivir esta época, amigo. Con este manijazo de 24 horas que nos propina esta gente.
ResponderEliminarActo fallido el de Julio Blank, que lo pinta tal cual es, un cipayo del poder mediático, ejemplo de cinismo e hipocresía.
ResponderEliminarMás de cuatro años después de publicada leo esta nota, y puedo decir que el tiempo me dio la razón. Los verdaderos cipayos fueron los zurdos decadentes y pseudoprogres que llevaron al país a la bancarrota. El grupo Clarín le terminó ganando la batalla al Gobierno pero no porque haya sido el más poderoso de los dos sino porque el kirchnerismo patético nunca pudo ganar ninguna de las guerras que empezó
ResponderEliminarRespecto de Blanck, solo puedo decir que es un excelente periodista de opinión, por más que trabaje para Clarín
Sigo esperando que publiquen mi comentario a favor de Julio Blanck, pequeños fachos de mentalidad pequeñita y autoritaria.
ResponderEliminarjajajajajaja. Podrás observar que publicamos poco últimamente, resulta evidente que en este momento nuestras ideas no prevalecen y el país está siendo arrasado por una mafia inocultable, lo cual a mí resulta me resulta bastante doloroso. Decir que 4 años el tiempo te dio la razón es como decir que al final todos moriremos.No, chabón, a este país lo entregaron desde que nació quienes gobiernan una vez más, y en tiempos recientes lo terminaron de liquidar con blindaje y megacanje, se recuperó con lo que había, entre los cuales están las personas maleducadas y mentirosas como vos, y ahora han vuelto a hundirlo. Es la realidad, muchacho, y por más que ahora saquen a la jauría que les toleró todas las matufias desde el final de la dictadura, que encarcelen a todo el mundo como corrupto, no se puede tapar el sol con las manos.Se puede mirar para otro lado, y ser c´mplice, como todas las sociedades tiene su parte cómplice, pero no oculta el fondo de la cuestión, que es que quienes saquearon, saquean y saquearán son quienes gobiernan ahora, y Clarín formó, forma hy formará parte de ese saqueo. Y Julio Blanck seguirá relatando conversaciones en las que no estuvo como si hubiera estado, y conversaciones telefónicas desde ambos lados de la línea, y eso será porque se las inventó o porque tenía pinchados los teléfonos de la Rosada y eso es un delito grave. En cambio mentir sigue impune, se está intentando que decir la verdad, como en el caso de los blanqueadores, esté penado. Igual no considero a Julio Blanck como periodista, es un editorialista. Y hubo una época en que me caía bien, pero ahora me parece junto con su pandilla responsable de que este país esté siendo troceado y una parte de su sociedad estigmatizada. Y eso no ocurrió durante el kirchnerismo, quienes ahora "cambiaron" consideraban que DISCUTIRLES era atentar contra su libertad, que intentar cualquier cosa que restañara algunas heridas era clientelismo, e impedir que todas las divisas del país se fugaran una traba a la libertad. Este comentario tuyo es como ejemplar: tardás CUATRO AÑOS en leer esta nota y pretendés que se te conteste inmediatamente, y como no ocurre, descalificás inmediatamente. Tal vez seas Julio blanck. Me haría muchísima gracia, una alegría en estos tiempos tan oscuros. Fachos autoritarios.... jajaja. Se nota que a toda esa banda de calumniadores seriales les pasaron muchas cosas en los años de los fachos autoritarios... Sos un impostor, seas quién seas. Y Julio Blanck, un seudoprogre con seudónimo, ASALARIADO DE rEPSOL MIENTRAS rEPSOL VACIABA YPF. Eso está documentado. No es un delito. Pero ser decirse periodista, una caradurez.
ResponderEliminarY? ¿O estás escribiendo otra vez, en tu aniversario de Puente Avellaneda, "La crisis causó dos nuevas muertes"? ¿Cuántas lleva esta crisis autoinflingida, ocultadas por tus amos, Blanck? ¿O vas a tardar otros cuatro años, diciendo que "el tiempo te dio la razón"?
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