LA PREGUNTA DEL POR QUÉ

En medio de tanto ruido, sería interesante interpelar a personas de la calle, que dicen, gritan que van a participar de la marcha silenciosa. ¿Para qué? Para SABER. Estaría bueno que nos cuenten quién era Nisman, a qué dedicó su vida, estos últimos años sobre todo, que merezcan ese el olor a multitudes, el halo de santidad.

¿Qué hizo Nisman, aparte de morir, de momento, que se sepa, por mano propia? Pero con detalles ¿eh? Nada de vaguedades, de generalidades. Cuando se solicita la canonización de un mortal, el que la propone debe describir y poder probar dos milagros que el difunto haya obrado. Siguiendo ese razonamiento ¿Cuáles son los milagros/bendiciones que obró? ¿Quienes fueron los beneficiarios, que sintieron el hálito de la santidad? Suena duro, suena a chicana.

Pero no lo es.

Marcharán por la memoria de alguien que, para personas como yo, fue un individuo que negoció con el diablo en muchísimas ocasiones, encarnado en agentes, en servicios secretos extranjeros a los que no dudó en servir como un vulgar traidor a su propio país, aún a costa del sufrimiento de familiares y amigos de las víctimas de una masacre ocurrida hace más de 20 años. Y como último acto, intentó procesar a una presidenta elegida democráticamente con una causa que acusa de cosas que ni siquiera son delitos, y sin pruebas.

Estos hechos son de dominio público, quienes participen en la marcha saben que las cosas han sido así.

Entonces, uno pregunta. ¿Esos son los motivos? O son otros que uno desconoce?

Blanquear, nos va a hacer bien a todos. Las cosas que se homenajean, son cosas que, desde mi perspectiva, se le hacen a enemigos. Y sin embargo, supuestamente, los "discordantes" somos nosotros. ¿Por qué?

QUEREMOS PREGUNTAR.

QUEREMOS SABER.

EXPLÍQUENOS QUÉ SE HOMENAJEA, DE UNA FORMA QUE PODAMOS ENTENDERLA.